Copa América 2011. La selección pasó del sueño a una pesadilla. La derrota ante Costa Rica (2-0) la obliga a ganar a Colombia, en la última fecha.
Gery Zurita Mustafá. Jujuy
Bolivia sufrió anoche en Jujuy un durísimo revés ante Costa Rica (2-0) y con este inesperado resultado sus posibilidades de clasificación para los cuartos de final de la Copa América se reducen a un milagro en la última fecha frente a Colombia, único líder del grupo A, el domingo en Córdoba.
Costa Rica dio a Bolivia una lección de humildad y amor a la camiseta con un fútbol simple y efectivo, cuando nadie daba un céntimo de esperanza a un equipo de bajo perfil que venía de una derrota e injustamente lo daban por muerto. Sin embargo, con la victoria de anoche los Ticos recuperaron su autoestima y la chance de mantenerse en el torneo, aunque para ello tendrán que derrotar, o mínimo empatar, en la última fecha a Argentina.
La lentitud y las imprecisiones en el seleccionado boliviano fueron una constante -mucho más después del primer tanto en contra- y la carencia de gol terminaron hundiendo al flojo equipo de Gustavo Quinteros que fue incapaz de encontrar el camino a la victoria.
De no haber sido por la gran actuación del arquero Carlos Arias, que atajó un penal y ganó dos mano a mano ante los delanteros rivales, el partido fácilmente se hubiera cerrado con otra vergonzosa e histórica goleada, como en Colombia 2001 (4-0). Un balón que rebotó en el vertical y otro que devolvió el horizontal salvaron de un par de caídas el arco boliviano en el mejor tránsito futbolístico del seleccionado centroamericano.
Los goles de Josué Martínez (59’) y de Joel Campbell (78’), la figura del partido, terminaron ahogando las esperanzas de clasificación del equipo boliviano cuando se pensaba que el avance a la siguiente fase era pan comido.
Si estando con el equipo completo Bolivia pecó de inoperante (ni Martins, ni Edivaldo ni Arce generaron peligro real de gol), sin los expulsados Wálter Flores y Ronald Rivero la tarea de revertir el marcador se hizo más cuesta arriba, quedando sepultadas las ilusiones de triunfo ante la decepción de miles de bolivianos que impotentes sufrían por dentro, entre ellos el presidente Evo Morales.
Salvo un remate de Arce que salió por encima del travesaño, en el primer tiempo, y otro tiro cruzado de Alcides Peña, en el complemento, Bolivia se aplazó en la zona más débil e improductiva del equipo. Si después del partido contra Argentina los jugadores bolivianos fueron elevados a rango de héroes, después de lo de anoche se confirma que la selección no está preparada para afrontar esta clase de desafíos.
Gustavo Quinteros dijo anoche, en una conferencia de prensa oficial, que Bolivia había jugado mejor que ante Argentina, pero en el fondo lamentó el mal que históricamente aqueja a Bolivia: la falta de gol.
Con esta derrota la selección nacional está obligada a ganar el domingo ante Colombia, porque otro resultado no le sirve, de lo contrario volverá nuevamente a casa con el sabor amargo de la eliminación prematura, como ocurrió en las últimas cuatro ediciones de Copa América.
Martins pide no desfallecer
El delantero boliviano Marcelo Martins instó a sus compañeros a levantar la cabeza tras la derrota de ayer.
“Tenemos que levantar la cabeza, sabemos que las posibilidades de clasificar todavía están latentes, lo que hay que hacer es creer que aún podemos avanzar”, aseguró el jugador.
Bolivia viene de debutar con un empate 1-1 ante Argentina y debe enfrentar en la próxima fecha a Colombia en Santa Fe, el domingo.
“Con Colombia la historia será otra”, afirmó Martins, confiado en las posibilidades del equipo que dirige el argentino-boliviano Gustavo Quinteros.
El número 9 de la selección de Bolivia admitió anoche que su equipo jugó mal, que no pudo encontrar el rumbo y consideró que Costa Rica mereció el triunfo.
“Esperábamos hacer un gran partido, dejamos todo en la cancha pero no salieron las cosas”, agregó.
Minuto 90
Sello propio. Los organizadores de la Copa América y la fabricante de balones Nike se pusieron de acuerdo para dar un toque especial al torneo. Los balones que se usaron en el partido entre Bolivia y Costa Rica tenían impresos nombres de los equipos que se enfrentaban, la fecha del partido, el nombre de la ciudad y el estadio donde se jugó.
Dedicado. Tras el segundo gol de Costa Rica, convertido por el delantero Joel Campbell, todos los jugadores ‘Ticos’ festejaron alrededor de una polera con el número 20 que usaba Dennis Marshall, que murió hace poco durante un accidente de tránsito cuando regresaba a su casa, después participar en la Copa de Oro (EEUU).
Adverso. El descontento de la gente que asistió al estadio 23 de Agosto de Jujuy a apoyar a Bolivia fue creciendo conforme pasaban los minutos y en el segundo tiempo apoyó a Costa Rica, con el tradicional Olé, Olé, cuando los ‘Ticos’ dominaban el balón. El apoyo de los bolivianos decayó y la banda de música dejó de sonar.
Donación. El Banco Santander, auspiciador de la Copa Libertadores que organiza la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), donará a la Unicef $us 1.000 por cada gol que se marque durante esta Copa América. Ese dinero deberá ser destinado a los programas de educación en diferentes países.
La figura
Joel Campbell
Equipo: Costa Rica
Puesto: delantero
Si bien en el primer tiempo su figura no tuvo mucho protagonismo, en el segundo fue clave para sellar la victoria. Convirtió el gol de la tranquilidad.
En números
10
goles
Son los tantos que se han marcado en ocho partidos disputados hasta la fecha en la Copa América.
Fuente El Deber
Gery Zurita Mustafá. Jujuy
Bolivia sufrió anoche en Jujuy un durísimo revés ante Costa Rica (2-0) y con este inesperado resultado sus posibilidades de clasificación para los cuartos de final de la Copa América se reducen a un milagro en la última fecha frente a Colombia, único líder del grupo A, el domingo en Córdoba.
Costa Rica dio a Bolivia una lección de humildad y amor a la camiseta con un fútbol simple y efectivo, cuando nadie daba un céntimo de esperanza a un equipo de bajo perfil que venía de una derrota e injustamente lo daban por muerto. Sin embargo, con la victoria de anoche los Ticos recuperaron su autoestima y la chance de mantenerse en el torneo, aunque para ello tendrán que derrotar, o mínimo empatar, en la última fecha a Argentina.
La lentitud y las imprecisiones en el seleccionado boliviano fueron una constante -mucho más después del primer tanto en contra- y la carencia de gol terminaron hundiendo al flojo equipo de Gustavo Quinteros que fue incapaz de encontrar el camino a la victoria.
De no haber sido por la gran actuación del arquero Carlos Arias, que atajó un penal y ganó dos mano a mano ante los delanteros rivales, el partido fácilmente se hubiera cerrado con otra vergonzosa e histórica goleada, como en Colombia 2001 (4-0). Un balón que rebotó en el vertical y otro que devolvió el horizontal salvaron de un par de caídas el arco boliviano en el mejor tránsito futbolístico del seleccionado centroamericano.
Los goles de Josué Martínez (59’) y de Joel Campbell (78’), la figura del partido, terminaron ahogando las esperanzas de clasificación del equipo boliviano cuando se pensaba que el avance a la siguiente fase era pan comido.
Si estando con el equipo completo Bolivia pecó de inoperante (ni Martins, ni Edivaldo ni Arce generaron peligro real de gol), sin los expulsados Wálter Flores y Ronald Rivero la tarea de revertir el marcador se hizo más cuesta arriba, quedando sepultadas las ilusiones de triunfo ante la decepción de miles de bolivianos que impotentes sufrían por dentro, entre ellos el presidente Evo Morales.
Salvo un remate de Arce que salió por encima del travesaño, en el primer tiempo, y otro tiro cruzado de Alcides Peña, en el complemento, Bolivia se aplazó en la zona más débil e improductiva del equipo. Si después del partido contra Argentina los jugadores bolivianos fueron elevados a rango de héroes, después de lo de anoche se confirma que la selección no está preparada para afrontar esta clase de desafíos.
Gustavo Quinteros dijo anoche, en una conferencia de prensa oficial, que Bolivia había jugado mejor que ante Argentina, pero en el fondo lamentó el mal que históricamente aqueja a Bolivia: la falta de gol.
Con esta derrota la selección nacional está obligada a ganar el domingo ante Colombia, porque otro resultado no le sirve, de lo contrario volverá nuevamente a casa con el sabor amargo de la eliminación prematura, como ocurrió en las últimas cuatro ediciones de Copa América.
Martins pide no desfallecer
El delantero boliviano Marcelo Martins instó a sus compañeros a levantar la cabeza tras la derrota de ayer.
“Tenemos que levantar la cabeza, sabemos que las posibilidades de clasificar todavía están latentes, lo que hay que hacer es creer que aún podemos avanzar”, aseguró el jugador.
Bolivia viene de debutar con un empate 1-1 ante Argentina y debe enfrentar en la próxima fecha a Colombia en Santa Fe, el domingo.
“Con Colombia la historia será otra”, afirmó Martins, confiado en las posibilidades del equipo que dirige el argentino-boliviano Gustavo Quinteros.
El número 9 de la selección de Bolivia admitió anoche que su equipo jugó mal, que no pudo encontrar el rumbo y consideró que Costa Rica mereció el triunfo.
“Esperábamos hacer un gran partido, dejamos todo en la cancha pero no salieron las cosas”, agregó.
Minuto 90
Sello propio. Los organizadores de la Copa América y la fabricante de balones Nike se pusieron de acuerdo para dar un toque especial al torneo. Los balones que se usaron en el partido entre Bolivia y Costa Rica tenían impresos nombres de los equipos que se enfrentaban, la fecha del partido, el nombre de la ciudad y el estadio donde se jugó.
Dedicado. Tras el segundo gol de Costa Rica, convertido por el delantero Joel Campbell, todos los jugadores ‘Ticos’ festejaron alrededor de una polera con el número 20 que usaba Dennis Marshall, que murió hace poco durante un accidente de tránsito cuando regresaba a su casa, después participar en la Copa de Oro (EEUU).
Adverso. El descontento de la gente que asistió al estadio 23 de Agosto de Jujuy a apoyar a Bolivia fue creciendo conforme pasaban los minutos y en el segundo tiempo apoyó a Costa Rica, con el tradicional Olé, Olé, cuando los ‘Ticos’ dominaban el balón. El apoyo de los bolivianos decayó y la banda de música dejó de sonar.
Donación. El Banco Santander, auspiciador de la Copa Libertadores que organiza la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), donará a la Unicef $us 1.000 por cada gol que se marque durante esta Copa América. Ese dinero deberá ser destinado a los programas de educación en diferentes países.
La figura
Joel Campbell
Equipo: Costa Rica
Puesto: delantero
Si bien en el primer tiempo su figura no tuvo mucho protagonismo, en el segundo fue clave para sellar la victoria. Convirtió el gol de la tranquilidad.
En números
10
goles
Son los tantos que se han marcado en ocho partidos disputados hasta la fecha en la Copa América.
Fuente El Deber
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