El periodista francés Romeo Langlois, fue liberado este miércoles por la guerrilla FARC en el pueblo de San Isidro, en Caquetá, sur de Colombia.
Saludado por los habitantes del lugar, el periodista caminó por las calles del pueblo e hizo sus primeras declaraciones, antes de reunirse con la comisión humanitaria que le vino a recoger tras pasar 32 días en cautiverio.
"Estoy muy satisfecho y aliviado de recibir a mi compatriota. Este es un momento de alivio fuerte, porque Romeo podrá seguir con su trabajo periodístico y reunirse con su familia", dijo en el lugar el enviado del gobierno Jean Baptiste Chauvin.
Langlois, de 35 años y corresponsal de la cadena de televisión France 24, aseguró que durante su cautiverio nunca estuvo atado y que "siempre me han tratado como un invitado, siempre han sido muy respetuosos".
"Además de haberme retenido por un mes cuando estaba herido, todo el resto ha ido muy bien. No me puedo quejar", añadió.
Langlois cayó en poder de las FARC el pasado 28 de abril, cuando la patrulla militar con la que se desplazaba para realizar un reportaje sobre operativos antidrogas fue atacada por guerrilleros en Caquetá.
"Yo no necesitaba esta experiencia para conocer el conflicto colombiano ni la guerrilla. Tengo la convicción de que hay que seguir cubriendo este conflicto. Conmigo se ha hecho mucha política de muchos lados. Me parece triste que haya que retener gente para que la gente venga a esta zona", añadió.
El Sol
Saludado por los habitantes del lugar, el periodista caminó por las calles del pueblo e hizo sus primeras declaraciones, antes de reunirse con la comisión humanitaria que le vino a recoger tras pasar 32 días en cautiverio.
"Estoy muy satisfecho y aliviado de recibir a mi compatriota. Este es un momento de alivio fuerte, porque Romeo podrá seguir con su trabajo periodístico y reunirse con su familia", dijo en el lugar el enviado del gobierno Jean Baptiste Chauvin.
Langlois, de 35 años y corresponsal de la cadena de televisión France 24, aseguró que durante su cautiverio nunca estuvo atado y que "siempre me han tratado como un invitado, siempre han sido muy respetuosos".
"Además de haberme retenido por un mes cuando estaba herido, todo el resto ha ido muy bien. No me puedo quejar", añadió.
Langlois cayó en poder de las FARC el pasado 28 de abril, cuando la patrulla militar con la que se desplazaba para realizar un reportaje sobre operativos antidrogas fue atacada por guerrilleros en Caquetá.
"Yo no necesitaba esta experiencia para conocer el conflicto colombiano ni la guerrilla. Tengo la convicción de que hay que seguir cubriendo este conflicto. Conmigo se ha hecho mucha política de muchos lados. Me parece triste que haya que retener gente para que la gente venga a esta zona", añadió.
El Sol
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