La selección española se volvió a dejar ver en Gniewino tras trabajar a puerta cerrada el viernes. Los hombres de Vicente del Bosque se dividieron en dos grupos. Con peto se ejercitaron Xavi, Javi Martínez, Iniesta, Albiol, Pedro, Torres, Cesc, Silva, Juanfran y Xabi Alonso. Sin él estuvieron Llorente, Busquets, Navas, Cazorla, Negredo, Piqué, Arbeloa, Mata, Ramos y Jordi Alba.

Los internacionales se divirtieron al inicio de la sesión participando en distintos juegos a las órdenes de Javier Miñano. Trabajaron la concentración, la atención y la velocidad de reacción. En uno de los juegos tenían que emparejarse evitando quedar suelto dentro del grupo de 23 y en otro debían tirarse al suelo rápidamente. El último que lo hacía perdía y se llevaba el aplauso de los demás mientras hacía unas abdominales de castigo.

Busquets se ejercitó al mismo ritmo que sus compañeros y no dio signos de que le doliese el pie donde recibió el golpe ante Irlanda. Jordi Alba lució un pequeño vendaje por debajo de la rodilla izquierda. Arrastra pequeñas molestias desde hace días pero no parece que vaya a tener problemas para estar ante Croacia si el seleccionador lo considera oportuno. Al final recibió ayuda para estirar durante unos diez minutos.

Por tanto, Del Bosque tendrá a todos los jugadores a su disposición y podrá decidir si da descanso a alguno de los titulares apercibidos de sanción para que tengan minutos jugadores que de momento no han contado. Al final de la sesión, se separaron de los que fueron titulares ante Irlanda para disputar un partidillo en campo reducido.