Un allanamiento policial efectuado por la División de Propiedades, en la zona Alto Lima, II sección, con presencia del Ministerio Público, en la avenida Huayna Potosí, concluyó con la quema de las pertenencias y parte del domicilio de una supuesta banda de monreros.
El juez Daniel Espinoza del Juzgado Quinto de Instrucción en lo Penal, ordeno la realización de tres allanamientos, el primero en la zona Franz Tamayo No.2045, ex tranca de Río Seco, el segundo en la zona Huayna Potosí No.27 y el tercero en la avenida Aucapata Intersección Chajlaya, con la finalidad de proceder a la detención de Edwin Mamani y Eduardo Quispe, sospechosos de pertenecer a la banda delictiva.
De acuerdo a la información proporcionada por el fiscal designado a la División de Propiedades, Ramiro Quenta, los allanamientos se realizaron desde las 06:00 hasta las 08:00 horas, tiempo en el que los vecinos de la avenida Huayna Potosí, se habrían anoticiado de la acción judicial, lo que despertó malestar en la zona, ya que dicha propiedad habría sido quemada después de identificarse en ella a unos sospechosos de robo en 2007.
Estos antecedentes motivaron para que después de la acción policial, los vecinos alertados y enardecidos, se concentren en el lugar, por más de cuatro horas, para ingresar por la fuerza a la vivienda allanada, con el fin de sacar y quemar todos los enseres que se encontraban en su interior.
Entretanto, los 20 efectivos policiales del Regimiento Cinco, concentrados en el sector, fueron arrinconados, mientras la turba procedía a ingresar al inmueble y quemar todos los objetos que se encontraban en la vivienda.
“Yo reconocí mi edredón y todavía falta su par; hemos encontrado un alicate que utilizaban para romper candados, había estado dentro de la ropa. Los vecinos estamos seguros de que los que viven en esta casa son ladrones”, afirmó Germán Chiri uno de los vecinos víctimas de robo.
“Hay polleras y enaguas nuevitas, dentro de los bultos están amarrados (…) Ella se dedica al comercio y su marido es supuestamente albañil, tienen ropa y bicicletas nuevas que no es posible comprar con el trabajo de todos los días”, afirmó Guillermina Mamani vecinal de la zona.
Hasta el cierre de edición cinco personas se encontraban detenidas en dependencias de la Felcc, que de acuerdo a las investigaciones, supuestamente, estarían involucradas con la banda de monreros. La Policía continúa en la búsqueda de los sospechosos, presumibles cabecillas de la banda delictiva.
El juez Daniel Espinoza del Juzgado Quinto de Instrucción en lo Penal, ordeno la realización de tres allanamientos, el primero en la zona Franz Tamayo No.2045, ex tranca de Río Seco, el segundo en la zona Huayna Potosí No.27 y el tercero en la avenida Aucapata Intersección Chajlaya, con la finalidad de proceder a la detención de Edwin Mamani y Eduardo Quispe, sospechosos de pertenecer a la banda delictiva.
De acuerdo a la información proporcionada por el fiscal designado a la División de Propiedades, Ramiro Quenta, los allanamientos se realizaron desde las 06:00 hasta las 08:00 horas, tiempo en el que los vecinos de la avenida Huayna Potosí, se habrían anoticiado de la acción judicial, lo que despertó malestar en la zona, ya que dicha propiedad habría sido quemada después de identificarse en ella a unos sospechosos de robo en 2007.
Estos antecedentes motivaron para que después de la acción policial, los vecinos alertados y enardecidos, se concentren en el lugar, por más de cuatro horas, para ingresar por la fuerza a la vivienda allanada, con el fin de sacar y quemar todos los enseres que se encontraban en su interior.
Entretanto, los 20 efectivos policiales del Regimiento Cinco, concentrados en el sector, fueron arrinconados, mientras la turba procedía a ingresar al inmueble y quemar todos los objetos que se encontraban en la vivienda.
“Yo reconocí mi edredón y todavía falta su par; hemos encontrado un alicate que utilizaban para romper candados, había estado dentro de la ropa. Los vecinos estamos seguros de que los que viven en esta casa son ladrones”, afirmó Germán Chiri uno de los vecinos víctimas de robo.
“Hay polleras y enaguas nuevitas, dentro de los bultos están amarrados (…) Ella se dedica al comercio y su marido es supuestamente albañil, tienen ropa y bicicletas nuevas que no es posible comprar con el trabajo de todos los días”, afirmó Guillermina Mamani vecinal de la zona.
Hasta el cierre de edición cinco personas se encontraban detenidas en dependencias de la Felcc, que de acuerdo a las investigaciones, supuestamente, estarían involucradas con la banda de monreros. La Policía continúa en la búsqueda de los sospechosos, presumibles cabecillas de la banda delictiva.
El Diario
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