Con las altas temperaturas y el buen tiempo, apetece tomar alimentos frescos y con alto contenido de agua, como por ejemplo las frutas, verduras y hortalizas crudas. Con ellas podrás confeccionar platos frescos, refrescantes y ligeros.

En cuanto a las frutas, es una muy buena oportunidad para acostumbrarse al gran abanico multicolor de esta temporada: albaricoques, ciruelas, higos, cerezas, melocotón, melón, sandía, nectarinas…

Las recomendaciones diarias de ingesta de fruta, verdura y hortalizas nos indican que, como mínimo, tenemos que tomar 5 raciones al día: tres de fruta (al menos una de ellas rica en vitamina C, como por ejemplo cítricos, fresas, frutas del bosque, kiwi, melón, etc.) y dos de verduras y hortalizas (como mínimo una de ellas en forma cruda).

Conseguir tomar las 5 raciones de fruta y verdura al día no es difícil, sólo requiere un poco de organización y de imaginación. Queremos darte unos consejos prácticos para que te sea más fácil conseguir que frutas, verduras y hortalizas acaben formando parte de tu alimentación habitual:

- Puedes repartir las tres raciones de fruta al día tomando una al desayuno o a media mañana, una a la merienda y la otra como postre de la comida y/o de la cena

- Además de tomar la fruta entera, las puedes preparar a trocitos mezclada con yogur, cereales, en ensaladas, en macedonia, con miel, en batidos, zumos naturales y licuados, …

- Llévate a la playa o a la piscina fruta fresca fría para picar, de este modo te refrescarás y evitarás comprar piscolabis más calóricos

- Para conseguir llegar a las dos raciones diarias de verduras y hortalizas, escoge siempre recetas que las lleven entre sus ingredientes

- Añádelas a los bocadillos: prepara bocadillos vegetales con tomate, hojas de lechuga y rodajas de mango, añade pimiento al bocadillo de atún, haz más original el bocadillo de queso fresco añadiendo endibias, manzana, nueces y un poco de miel, etc.

- Utilízalas para espesar las salsas en lugar de utilizar nata o crema de leche: tan sencillo como cocerlas, triturar-las y añadirlas a las salsas. Una manera original de aportar textura, sabor y nutrientes

- Prepara las pizzas caseras con frutas, verduras y hortalizas. Puedes añadir alcachofa, tomate, piña, cebolla, manzana, brécol, setas, ciruelas, espárragos, berenjena, etc.

- Visita el mercado y llévate una fruta, verdura y hortaliza que habitualmente no compras. Investiga un poco sobre sus propiedades y elabora una receta con ella. Si te gusta el resultado, será la mejor manera de incluirla en tus hábitos

- Además de en ensaladas y hervidas, recuerda que existen infinidad de recetas elaboradas con verduras y hortalizas: rellenas, al horno, a la parrilla, en purés, tempura, cremas y gazpachos, gratinadas, con pasta, arroz etc. Sólo hay que refrescar las ideas con un libro de recetas o haciendo una búsqueda por Internet.

Por último, recuerda escoger frutas, verduras y hortalizas de temporada. Son más económicas, más ecológicas, más sabrosas y más ricas en nutrientes.