Una vez que entre en funcionamiento, el teleférico La Paz-El Alto empleará a más de 300 trabajadores que serán previamente capacitados y formarán parte del personal fijo de la empresa administradora.
“La idea es que este nuevo sistema sea administrado por los bolivianos en la parte operativa, administrativa y de mantenimiento”, afirmó César Dockweiler, asesor general del Viceministerio de Transportes.
En principio, esta cartera estatal formará una Unidad Técnica de Transporte por Cable que empleará a 20 funcionarios, y en enero del próximo año contratará a 15 personas más para la fiscalización de estudios y obras, aprobación de trazado de líneas y diseños de estaciones, y el relacionamiento con vecinos y transportistas, entre otras funciones.
Luego, en mayo se capacitará a 56 profesionales -entre ingenieros electromecánicos, mecánicos, electricistas y técnicos en mecánica y electricidad- que serán parte del área técnica operativa.
En febrero de 2014 se contratará a 227 universitarios que trabajarán medio tiempo en el control del embarque de los pasajeros, en la operación de los centros de control de video, la venta de taquilla y el sistema de vigilancia en las estaciones.
El pasado 10 de septiembre, el Gobierno puso en marcha el proyecto del teleférico con la firma del contrato con la empresa austriaca Doppelmayr, encargada de ejecutar la obra que demandará una inversión de más de 234 millones de dólares.
La firma, por su parte, contratará a la empresa constructora para la edificación de las 11 estaciones y las 74 torres instaladas en áreas públicas de La Paz y El Alto.
Capacitación y coordinación
Además de la capacitación y asistencia técnica en el proceso de construcción, la empresa austriaca acompañará y supervisará al personal boliviano por 12 meses después de concluir la obra, en 2014. Dockweiler adelantó que en la capacitación se aplicará una metodología teórico- práctica para que el personal boliviano “aprenda haciendo”.
Recientemente se realizó una primera reunión entre el Gobierno nacional, la Gobernación de La Paz y las alcaldías de La Paz y El Alto, para conformar el Comité Metropolitano de Transporte por Cable.
El rol de esta comisión, según Dockweiler, no es supervisar ni fiscalizar la obra, sino facilitar e impulsar el proceso para que se cumplan los plazos previstos.
Todavía está en evaluación si en este comité participarán las federaciones de juntas vecinales y los transportistas.
El asesor también informó que la nueva empresa de transporte tendrá oficinas en la zona de San Jorge, donde funcionarán tres secciones: administrativa, que velará por la logística general; operativa, que supervisará el funcionamiento del sistema de transporte y la interconexión con los operadores terrestres, y otra de mantenimiento.
Dockweiler también adelantó algunos aspectos inherentes al funcionamiento del teleférico. Prestará servicio 17 horas al día y en su descanso recibirá mantenimiento. Además, durante cinco días continuos al año el sistema parará para una exhaustiva inspección. Las fechas serán elegidas de tal manera que no afecten la demanda de los pasajeros de La Paz y El Alto.
“La idea es que este nuevo sistema sea administrado por los bolivianos en la parte operativa, administrativa y de mantenimiento”, afirmó César Dockweiler, asesor general del Viceministerio de Transportes.
En principio, esta cartera estatal formará una Unidad Técnica de Transporte por Cable que empleará a 20 funcionarios, y en enero del próximo año contratará a 15 personas más para la fiscalización de estudios y obras, aprobación de trazado de líneas y diseños de estaciones, y el relacionamiento con vecinos y transportistas, entre otras funciones.
Luego, en mayo se capacitará a 56 profesionales -entre ingenieros electromecánicos, mecánicos, electricistas y técnicos en mecánica y electricidad- que serán parte del área técnica operativa.
En febrero de 2014 se contratará a 227 universitarios que trabajarán medio tiempo en el control del embarque de los pasajeros, en la operación de los centros de control de video, la venta de taquilla y el sistema de vigilancia en las estaciones.
El pasado 10 de septiembre, el Gobierno puso en marcha el proyecto del teleférico con la firma del contrato con la empresa austriaca Doppelmayr, encargada de ejecutar la obra que demandará una inversión de más de 234 millones de dólares.
La firma, por su parte, contratará a la empresa constructora para la edificación de las 11 estaciones y las 74 torres instaladas en áreas públicas de La Paz y El Alto.
Capacitación y coordinación
Además de la capacitación y asistencia técnica en el proceso de construcción, la empresa austriaca acompañará y supervisará al personal boliviano por 12 meses después de concluir la obra, en 2014. Dockweiler adelantó que en la capacitación se aplicará una metodología teórico- práctica para que el personal boliviano “aprenda haciendo”.
Recientemente se realizó una primera reunión entre el Gobierno nacional, la Gobernación de La Paz y las alcaldías de La Paz y El Alto, para conformar el Comité Metropolitano de Transporte por Cable.
El rol de esta comisión, según Dockweiler, no es supervisar ni fiscalizar la obra, sino facilitar e impulsar el proceso para que se cumplan los plazos previstos.
Todavía está en evaluación si en este comité participarán las federaciones de juntas vecinales y los transportistas.
El asesor también informó que la nueva empresa de transporte tendrá oficinas en la zona de San Jorge, donde funcionarán tres secciones: administrativa, que velará por la logística general; operativa, que supervisará el funcionamiento del sistema de transporte y la interconexión con los operadores terrestres, y otra de mantenimiento.
Dockweiler también adelantó algunos aspectos inherentes al funcionamiento del teleférico. Prestará servicio 17 horas al día y en su descanso recibirá mantenimiento. Además, durante cinco días continuos al año el sistema parará para una exhaustiva inspección. Las fechas serán elegidas de tal manera que no afecten la demanda de los pasajeros de La Paz y El Alto.
Página Siete
No hay comentarios:
Publicar un comentario