La gran figura Bolivia fue Luis Galarza, el guardameta de Oriente Petrolero impidió que el arco del seleccionado nacional sea batido en varias oportunidades, dos de ellas quedaron grabadas en la retina del aficionado boliviano.

Lionel Messi se encargó de exigir al experimentado “Mono” Galarza. Ejecutó un tiro libre que tenía destino de gol en el primer tiempo; la pelota estaba a punto de insertarse al ángulo izquierdo del arco norte, pero una volada monumental del portero evitó que el esférico se encontrara con las redes.

La segunda acción y quizá más cercana para la victoria del equipo de Sabella se protagonizó sobre el final. El cronómetro marcaba 38 minutos con 57 segundos, Messi se había encontrado con una oportunidad inmejorable de anotar el 2 – 1 adueñándose de la pelota tras un rebote concedido por Ronald Raldes. La “Pulga” estaba frente al arco y en su afán de amagar tuvo que resignarse a ver como el portero le arrebataba el balón de los pies.

Galarza fue un gran líder y en una de sus tardes más inspiradas le negó a Messi poder completar su lista de arcos vencidos en Sudamérica. Al finalizar el encuentro de eliminatorias en La Paz, no sólo recibió un abrazo del mejor jugador del mundo, además se ganó el reconocimiento de millares de bolivianos que aplaudieron sus importantes intervenciones.