Nueva York, 7 de agosto.- En la séptima avenida, en el Central Park, en Manhattan, está el monumento de Simón Bolívar donde ayer se realizó un acto en conmemoración del 188 aniversario de la independencia del Estado Plurinacional de Bolivia.
Fueron el ministro de Relaciones Exteriores, David Choquehuanca, y el representante permanente de Bolivia ante Naciones Unidas, Sacha Llorenti, los encargados de izar la bandera boliviana y la wiphala.
"Es la primera vez que se iza la wiphala en el Central Park de Nueva York", dijo Llorenti quien mencionó que en el pasado no había este tipo de actividades de conmemoración y que en esta ciudad hay una comunidad boliviana activa y patriota.
En su discurso Choquehuanca le dijo a los presentes que en Bolivia se ha comenzado a construir la unidad, la esperanza y la armonía. Les recordó que Bolivia tiene todo, no sólo gas, sino recursos naturales, minerales y una cultura envidiable. "Ocupamos el tercer lugar a nivel mundial de potencial turístico".
"Bolivia poco a poco se está dignificando. Ya no somos esa Bolivia de antes". Señaló que el proceso de recuperación de los recursos naturales permite implementar programas que permitirán construir una Bolivia para todos. "Para que los bolivianos podamos comenzar a construir nuestros sueños en nuestra tierra, en nuestra Bolivia. Si vamos afuera, vamos a ir con ese orgullo con esa dignidad y vamos a retornar con esa experiencia para aportar, para que nuestro país siga creciendo".
Para Choquehuanca la traducción de política al quechua es ruana y al aymara luraña que significa hacer. "Política es hacer, es estar al servicio de nuestros pueblos y lo hacemos con orgullo".
Además, informó que en Bolivia se está aplicando el principio de vivir bien. Aruskipasijañanakasakipuniraquispaua, el principio que permite trabajar la armonía entre todos y entre el ser humano y la naturaleza. "Significa que siempre tenemos que dialogar, que siempre tenemos que comunicarnos".
Por su parte, Rino Romero, presidente del Comité Cívico boliviano en Nueva York, agradeció al Canciller por su presencia y envió un mensaje de integración a los bolivianos. "Lo único que quiero recordar a esta gran familia boliviana es que se mantenga unida para soportar todas las vicisitudes que la vida ofrece y más aun cuando la distancia al terruño querido es causa de sufrimiento".
El acto comenzó a las 5.30. Se realizó la entrega de ofrendas florales, la iza de las banderas y hubo baile: caporales y una cueca se escucharon en ese rincón del parque Central. Al final del acto se pudo degustar las tradicionales salteñas. Las personas que asistieron al acto recibieron banderas tricolores que en lo alto tenían un cinto azul, las mismas llegaron desde La Paz.
El Canciller atendió a todas las personas, se tomó fotografías y conversó con ellas casi hasta que el lugar quedó vacío. Luego se fue a caminar un poco con Llorenti. Hoy vuelve a Bolivia.
Oxígeno
No hay comentarios:
Publicar un comentario