Los asilos son una alternativa para cuidar a los abuelitos de la casa. Estos lugares son ideales para aquellos que no necesitan estar en un hospital, pero que ya no pueden ser cuidados en sus casas.

En el proceso de elegir un asilo pueden surgir algunas interrogantes.

Para guiarlo a escoger el indicado el Instituto Nacional de Envejecimiento, (NIH, por sus siglas en inglés), elaboró el artículo Asilos de ancianos: cómo escoger el lugar adecuado.
En la publicación recomiendan hacer una lista de los locales que se podrían contratar. También hay que preguntar cuántas personas viven en cada uno de ellos.

El siguiente paso consiste en visitar los locales. La ocasión es propicia para preguntar si el establecimiento cuenta con certificaciones sobre buenas prácticas de salud.
Un aspecto importante a observar, según se menciona en el artículo, es la apariencia de los residentes.

Se añade que los malos olores del local pueden indicar un problema, y los buenos aromas podrían ocultar otro. Si percibe alguno de los dos, pida al personal que le explique las razones.
Días después visite los locales por segunda vez, pero no anuncie que irá. De preferencia vaya un día de la semana y a una hora diferente de la primera visita.

De esta forma, podrá conocer a otros cuidadores y demás personal del asilo. Se sugiere ir a la hora de la comida para ver si las mesas están limpias y si los platos se ven apetecibles.

Ojo