En menos de dos semanas, tres funcionarios de la Alcaldía de El Alto perdieron la vida en circunstancias aún no esclarecidas. La semana pasada, uno de ellos fue atracado, y este fin de semana, otro asaltado y su esposa asesinada, y el tercero fue hallado a un costado de la autopista.

La madrugada del 8 de septiembre, uno de los asesores de la Dirección de Educación, Marcelo Márquez, fue encontrado sin vida, pero no le robaron ninguna de sus pertenencias. Una semana después, el director de Asentamientos, Carlos Oropeza, junto con su esposa, fue víctima de un atraco. Él recibió un golpe en la cabeza que lo dejó inconsciente, pero su esposa fue estrangulada.

El fin de semana, el director de Asuntos Jurisdiccionales, Jaime Alberto Pereira, murió en circunstancias aún no esclarecidas, pues dos fuentes municipales dieron versiones diferentes. Una dijo que sufrió un atraco y fue estrangulado; la otra, que murió en un accidente de tránsito. El informe oficial de lo ocurrido será brindado hoy por el director de Asesoría Jurídica, Abraham Aliaga.

A estos tres casos hay que añadir el hallazgo, ayer en la mañana, de un hombre, actualmente en estado de coma, que había sufrido un severo golpe en la cabeza; que si bien no es funcionario municipal, llevaba consigo un chaleco edil cuando fue atacado.

Asesinatos. Marcelo Márquez, quien fungía como asesor en la Dirección de Educación, se encargaba de revisar los contratos de compras y adquisiciones de material para colegios o equipamiento, como computadoras, mobiliario, entre otras funciones.

Su cuerpo fue hallado en la zona Candelaria del Distrito 5 de El Alto. Tenía una herida de tres centímetros en la región parietal derecha producto de un golpe, lo que le ocasionó la muerte por traumatismo encéfalo craneal. Se informó que Márquez fue arrastrado hasta el lugar donde fue encontrado, por lo que el crimen pudo haber sido en otra locación.

Cuando se hizo el levantamiento del cadáver, tenía todas sus pertenencias y se supo que éste asistió a un evento social, ya que en el interior de uno de sus bolsillos se encontró una invitación para un preste.

El sábado 14 de septiembre, Carlos Oropeza, director de Asentamientos y su esposa, habían ido a beber con sus amigos luego de retirar 7.000 bolivianos de préstamo de una entidad financiera.

La madrugada del domingo abordaron un taxi, que estaba ocupado por dos mujeres, una de ellas menor de edad. Oropeza recibió un golpe que lo dejó inconsciente; mientras su mujer fue estrangulada. El cuerpo de ella fue hallado en la avenida Arica de la zona Virgen del Carmen. Les robaron el dinero prestado y sus pertenencias. Oropeza está encargado de autorizar asentamientos de comerciantes en coordinación y aprobación con la Federación de Gremiales.

También el fin de semana, Jaime Pereira, director de Asuntos Jurisdiccionales, asistió a un cumpleaños de un funcionario edil. Luego, según una fuente municipal, se dirigió a su vivienda en un taxi, desde el cual había llamado a su familia para pedirles que alisten 70 bolivianos para cancelar el servicio. Después no se supo más de él hasta el lunes, cuando fue hallado en la morgue del Hospital de Clínicas de La Paz.

Pereira estaba a cargo de llevar adelante procesos penales, civiles y administrativos en contra de trabajadores ediles que incurrían en actos ilícitos y en contra de empresas e instituciones. Manifestó a La Razón en más de una oportunidad que era amenazado de muerte por sus investigaciones.

Golpean a un hombre uniformado

Confusión

La Policía derivó, ayer en la mañana, al Hospital Boliviano Holandés a un paciente de nombre Juan Carlos Nina. Éste sufrió un severo golpe en la cabeza, el cual lo dejó en estado de coma. Cuando fue atacado, vestía un chaleco municipal, aunque no era funcionario de El Alto.