Cuando te compras el reloj, lo primero que debes hacer es llenar un formulario (a conciencia) con tus antecedentes de salud, a partir del resultado que obtengas en el cuestionario, se resta tu edad actual y “a volar”, se larga la cuenta regresiva.

Cada reloj Tikker, viene con un cuestionario llamado “About Time” que guía a los usuarios en el dramático proceso de calcular tu vida útil, o mejor dicho la fecha de tu muerte.

Si bien parece morboso y absurdo que un reloj calcule la fecha de tu muerte, los creadores del reloj afirman que la idea de su concepción es ayudar a la gente a vivir un poco mejor y dejen de perder su valioso tiempo.

Fredrik Colting, creador del Tikker, dice que podemos tener una vida mejor y tomar mejores decisiones si somos conscientes de nuestra fecha de muerte. “Las pequeñas cosas que parecen poco importantes, suelen ser lo más relevante”, Tikker busca ayudar a encontrar esas cosas, según indica Fredrik.

Mientras Tikker es llamado el reloj de la muerte, su creador destacó el lado positivo de saber el día de tu muerte y tener una cuenta regresiva de las horas, días que te quedan por vivir.

El sitio web de Tikker, culmina en su página principal con una frase de Steve Jobs, que dice:

“Mis cosas favoritas en la vida no cuestan dinero. Es muy claro que el recurso más valioso que todos tenemos es el tiempo”.