The Strongest volvió a demostrar que es un equipo con mucho coraje y fuerza interna al derrotar a Blooming por la cuenta de dos goles a uno, en cotejo jugado en el estadio Siles, correspondiente al torneo liguero.

Un primer tiempo que fue hasta aburrido, sólo fue modificado por el gol de Almirón, delantero de los celestes, a los 42 minutos, tanto que dejó helados a los locales.

Los males parecían sumarse para el Tigre, ya que con tan sólo un minuto en el terreno de juego, Castro resultó expulsado al minuto del segundo tiempo.

Sin embargo, y contrariamente a lo que sucede con otros planteles, los atigrados sacaron a relucir la tradicional “garra”, para comenzar a dar vuelta el partido.

Fue así que a los setenta minutos, Bejarano sacó un remate de fuera del área que se convirtió en el uno a uno. Aún restaban muchos minutos para la culminación del encuentro.

Empero, el “destino futbolero” puso a prueba el fuste atigrado, cuando Reinoso marró un penal. La tarde volvía a ser cruceña en ese momento.

Un error, calificado de grave por el arquero de Blooming, Marco Vaca, insidió en el resultado del encuentro ya que con un hombre de más, los visitantes terminaron defendiendo su arco, contra un sistemático ataque de The Strongest.

Cuando corría el minuto 91 y las esperanzas parecían perdidas para los locales, apareció la jugada que en The Strongest siempre se puede aguardar: Un desborde de Bejarano por la derecha terminó en el pase para Reinoso, que se tomó la revancha del penal, tocando el balón de taquito, para conseguir el segundo gol atigrado que “devolvió la vida” a sus hinchas, que en las gradas agotaron todos los tonos del pentagrama para gritar el gol.

Ya es un clásico atigrado ganar sobre la hora, un poco más y se hace costumbre.