La Paz, 17 de abril.- En la fiesta de Semana Santa, las tradiciciones culinarias tienen otras expresiones y algunas de ellas más acentaudas. La venta de carne roja baja y sube la demanda de los pescados. Ahora bien, a allo se acentúa la tendencia de comprar los animales de mar, debido a que el gusto los mariscos, langostino, pulpo, calamar ya son parte del menú de muchos paceños.

En el mercado Rodriguez las amas de casa buscan estos productos para cumplir con la tradición de no comer carne roja y con la idea de incorporar platillos diferentes en fiestas especiales, como la de Semana Santa.

En las carnicerías del mercado Rodríguez de La Paz se ve un escaso número de personas que adquieren diferentes cortes de carne de res. Ppor ejemplo, donde ayer había 10 personas comprando carne de res (a media mañana), sólo dos optaban por romper esa creencia de que en días santos no se puede comer carne roja.

En un recorrido realizado por el periódico digital Oxígeno, el panorama es otro en los puestos de venta de pescados y en especial de los productos de mar, donde incluso hacen falta manos para vender y atender a los compradores. De hecho, las dos o tres personas no abastecían a la demanda.

“En este tiempo los compradores han aumentado y sigue aumentando, más y más. Antes era poco que compraba, lo venían los que conocían, pero ahora ha aumentado, hay más caseros”, asegura doña Cristina Alanes Flores, quien vende los productos marinos solo para Semana Santa.

Doña Juana Chalco, también vendedora de estos productos, asegura que “hay más demanda que otros años”. Pero no solo las vendedoras tienen esa precepción sino también las propias compradoras. “

Hay más demanda cada año, me parece que la gente está aprehendiendo a preparar (estos productos)”, indica Raquel Castro que compraba de doña Juana las colitas de camarón.

Ayuno de carne roja

Según la tradición, durante Semana Santa la Iglesia Católica sugiere a sus fieles a guardar ayuno de carne, en especial la de res, a fin de conmemorar los sufrimientos de Cristo, por ello se acostumbra la preparación de platos a base de pescado.

El precio, tanto de los pescados como de animalitos de mar, es variado y los hay para todos los bolsillos.

El kilo de colitas peladas de camarón cuesta 110 bolivianos, el preparado para la paella está a 60 bolivianos, el surtido de marisco está entre 40 y 45 bolivianos.

El kilo de langostino se puede comprar por 140 bolivianos y la libra a 70, el kilo de pulpo a 25 bolivianos al igual que el del calamar. La libra de bacalao cuesta Bs 45 bolivianos.

El precio de los pescados también varía y depende del tamaño. La libra de trucha se la puede encontrar entre 20 y 15 bolivianos, el pejerrey es el más caro, por Bs 35 pero también se puede encontrar a 25 .

La libra del ispi del lago Titicaca cuesta 10 bolivianos, con la ventaja de que está destripado, lavado y listo para freír.

El pejerrey

Olga Choque Colque, que vende pescados desde muy pequeña, junto a su madre, indica que el pejerrey es el producto que sí subió de precio pero que igual la gente compra, sin embargo la trucha es lo que más se está vendiendo.

Estos productos son del Lago Titicaca, algunos del sector de Copacabana, otros de las Islas del Sol. La venta de estos productos será muy requerida hasta el sábado, pero el pico alto será este viernes.

Los productos de mar llegan a La Paz, por lo general, desde el Perú. No hay productos chilenos, pues dicen que no tiene “ese sabor especial” que si tiene el peruano.

Según doña Cristina Alanes, los productos marinos antes eran traídos en bidones y a granel, pero ahora llegan embolsados y de mejor tamaño.

“Antes traían delgado, ahora es especial, como todo, los tiempos han cambiado entonces ahora ya traen algo mejor, porque también los de Senasag verifican y controlan”, dice.

Alanes, quien vende estos productos marinos solo en estas fechas pues el resto del año ofrece especies, mote cosido, chuño, ají y otros, sostiene que la ganancia de la venta “es un aguinaldo para nosotros”.