Viajar es conocer lugares y culturas, esa es la parte buena, pero lo que tiene de malo es cuando bajamos del avión o del ómnibus luego de muchas horas y el rostro está en la ruina total. Para eso debes refrescar tu rostro así:

lleva agua mineral en aerosol porque el aire de los aviones es muy seco y esto repercute negativamente en tu piel, entonces pulveriza tu cara con un poco de agua mineral de manera periódica.

No utilices grandes cantidades de maquillaje, evita utilizar delineadores de ojos, rimel, lápiz labial o sombra de ojos. Esto puede hacer que con el transcurso de las horas se corra y termines con el rostro y tu ropa manchada. Lo mejor es emplear muy pocos cosméticos y mejor si son suaves y livianos.

Asimismo, jamás olvidar de empacar las toallitas desmaquillantes, esto puede serte útil sobre todo cuando realizas viajes nocturnos.